¿Piel sensible? Siete consejos para tratar y calmar tu piel

La piel es el órgano más grande del cuerpo humano. Por lo tanto, no es algo que pueda ignorar cuando está seco, con picazón, rojo, escamoso o irritado.

Un estudio sugiere que el 71% de las personas sufre de sensibilidad en la piel, pero todos pueden sufrirla en algún momento de sus vidas.

Tener la piel sensible no es un diagnóstico, diagnosis médico sino una pista de que algo no va bien. Y llegar a la causa raíz puede hacer que sea más fácil encontrar alivio y prevenir problemas de sensibilidad en el futuro.

Siga leyendo para comprender las causas de la piel sensible y cómo puede mantener feliz al órgano más grande de su cuerpo.

¿Qué significa piel sensible?

La sensibilidad de la piel significa diferentes cosas para diferentes personas. Es por eso que puede ser difícil identificar las causas exactas o incluso identificar consistentemente la sensibilidad de la piel como un síntoma de un problema más importante.

“La piel sensible se produce cuando las terminaciones nerviosas sensoriales en las capas superiores de la piel, que responden a sensaciones como el tacto, el dolor, el calor y el frío, se irritan”, dijo Trevor Thompson, MD, dermatólogo de Banner Health. “La irritación ocurre cuando la barrera natural de la piel se debilita o se descompone por varios factores desencadenantes”.

Consejos para mantener tu piel sana y cómoda

No dejes que la piel sensible sea una pesadilla viviente. El Dr. Thompson compartió algunas formas en que puede lograr su mejor piel.

1. Evite lavarse en exceso o exfoliarse con demasiada frecuencia.

La limpieza y la exfoliación son pasos importantes en la rutina del cuidado de la piel. El lavado elimina la suciedad, la grasa, el maquillaje y puede ayudar a prevenir los brotes, mientras que la exfoliación puede eliminar el exceso de grasa y las células muertas de la piel que pueden obstruir los poros. Solo trata de no exagerar.

“El lavado excesivo a menudo puede eliminar los niveles de aceite natural de la piel y crear una sensibilidad injustificada”, dijo el Dr. Thompson. “La exfoliación puede ser especialmente dura en algunos tipos de piel, como las que tienen rosácea, alergias o pieles más viejas”.

Usa limpiadores suaves y delicados y usa un exfoliante líquido suave en lugar de un exfoliante físico (cualquier exfoliante o pulidor).

2. Mantenlo simple

Evite los productos que agregan fragancias, tintes/colores y conservantes. Menos ingredientes significan menos posibilidades de reaccionar ante algo.

“En términos generales, busque productos sin fragancia, sin colorantes, sin parabenos e hipoalergénicos”, dijo el Dr. Thompson. “Productos como estos son un buen punto de partida cuando se buscan productos para el cuidado de la piel sensible”.

3. realizar una prueba

Las pruebas pueden ayudarlo a descubrir qué puede estar contribuyendo a sus síntomas. Con el tiempo, puede desarrollar una reacción a los productos que ha tolerado en el pasado. Además, las empresas pueden cambiar los ingredientes sin cambios importantes en el diseño del empaque.

Si le preocupa su respuesta a un nuevo producto para la piel, aplique una pequeña cantidad del producto en un área oculta, como el interior de su brazo. Si no nota enrojecimiento o reacción al producto después de aplicarlo en el mismo lugar durante varios días, es probable que no sea alérgico al producto.

Su proveedor de atención médica puede realizar pruebas adicionales para alérgenos tópicos comunes a través de pruebas de parche.

4. Evite las duchas largas y calientes

El exceso de calor no es bueno para la piel. El agua caliente puede despojar a la piel de la humedad y aumentar la sequedad y la sensibilidad de la piel.

Use agua tibia cuando se limpie y tome duchas cortas de cinco a 10 minutos con agua tibia, no caliente.

5. Hidratar

Beba mucha agua para ayudar a eliminar las toxinas y rehidratarse. Beber agua tiene muchos beneficios potenciales para la salud y la belleza, ya que desintoxica y embellece la piel desde adentro. Limite la cafeína y el alcohol, que deshidratan la piel.

6. Protégete del sol

Use ropa protectora y un sombrero grande para minimizar el riesgo de daño solar y la sensibilidad. Además, elige un protector solar sin fragancia formulado para pieles sensibles.

“Busque los que tienen óxido de zinc o dióxido de titanio”, dijo el Dr. Thompson. “Querrá elegir un protector solar de amplio espectro con SPF 30 o superior”.

7. Póngase en contacto con un dermatólogo

Incluso si tiene cuidado con lo que se pone en la cara y el cuerpo, aún puede tener una reacción. Algunas reacciones pueden ser leves, mientras que otras pueden ser más graves.

Si sospecha sensibilidad en la piel, fijar una cita con un alergólogo y/o dermatólogo. https://acortar.link/rQaXsV